Halo carmesí
Día del "Jaque mate"
— ¿Has escuchado al viento
llorar?
La oscuridad y el silencio,
cual viejos amigos, se han instalado cómodamente en la camioneta. La única
ausente, en está ocasión es la Luna pues hoy a decidido no iluminarnos con su
presencia y dejarle el campo libre a la noche.
—Mi abuelo me dijo: “que es
lo más horrible que ha escuchado y que es algo que nunca olvidas”. Me lo conto
cuando se entero en que negocios estaba metido y también dijo: “Espero que
nunca lo escuches, hijo”
Respondo mi pregunta al
notar que nadie más lo hace, mis acompañantes parecen estar pensando en lo que
dije y solo me dirigen miradas a través del espejo retrovisor.
Recuerdo que le pregunte a
mi abuelo a que se refería, pero el fijo su vista en algún punto lejano de su
memoria y pareció perderse en él. Su silencio solo se rompió cuando me preguntó
por mis padres, jamás volvió a tocar el tema.
—Mi abuelo era muy joven
cuando la guerra estallo y llego a su ciudad natal, o eso recuerdo que me dijo.
No le gusta hablar sobre el tema, pero creo que escucho al viento llorar, en
esos tiempos.
Mis acompañantes siguen
escuchándome silenciosamente mientras sigo cavilando sobre lo que mi abuelo me
dijo, no sé porque lo he recordado justo ahora, pero espero que no sea hoy
cuando el viento decida hablarme.
La camioneta en la que voy,
avanza sin problemas. Al volante va Haruki, a su lado Kirishima y atrás vengo
yo solo. Dos camionetas más nos acompañan, una adelante y la otra atrás de
nosotros.
Justo ahora nos dirigimos a
casa de Henry. Gracias a que Stuart indago entre sus contactos, supimos que la
casa a la que vamos, la cual Gianella nos dijo que era de él, parece ser que no
es así, ya que la casa está a nombre de un tal Francis. Stuart dice que ese
nombre nunca apareció en las investigaciones del FBI, tal parece que Henry
astutamente se está escondiendo atrás de alguien más.
Stuart viene en otra de las
camionetas y aunque no está del todo de acuerdo con esta operación, decidió
venir con nosotros. Según nuestros cálculos debemos de estar en su casa antes
de que Henry llegue, de esta manera sacaremos a Takaba sin que interfiera, en
cuanto él esté a salvo, yo me encargaré de ese estúpido.
Gianella me mando un mensaje
en el cual me explicaba que sus hombres sabían que yo iría por Takaba, así que
no interferirán con nuestro trabajo, al contrario nos apoyaran, aunque según
dijo, sus hombres no están dentro de la casa, ellos son parte de la escolta
personal de Henry y toda la información que nos han proporcionado, la han
obtenido por las visitas que hacen a la casa y de las conversaciones que han
escuchado entre Henry y Justin. Sin embargo prefiero no confiarme y he dado
órdenes para que maten a cualquiera que intervenga.
Esperamos encontrar a máximo
doce hombres dispersos por toda la casa además de la sirvienta y de un niño, él
cual dicen que es raro, no se a que se refieren pero todo ha sido tomado en
cuenta.
Por fin llegamos, las
camionetas se detienen alejadas de la propiedad, de tal manera que no sean
vistas desde adentro o cuando llegue Henry.
La propiedad no tiene
vecinos cercanos, más bien está rodeado de naturaleza. ¿Cómo es que en medio de
una metrópoli tan poblada como lo es Nueva York, exista un lugar así? No lo sé
y tampoco me importa.
Gracias a la soledad del
lugar no habrá testigos de lo que haré, así que trabajaremos libremente. Todos
bajamos de las camionetas, cada uno revisa por última vez, sus armas con
silenciadores y las municiones. Stuart nos consiguió chalecos antibalas y unos
intercomunicadores.
La puerta de entrada está
cerrada. Uno de los chicos se acerca, a las cámaras de la entrada y sin perder
el tiempo les dispara, después hace lo mismo al cerrojo de la puerta, dejándolo
inservible.
No sabemos cuántas cámaras
puede haber en la casa pero eso no es algo que me preocupe.
Todos se preparan, pues con
el ruido que se ha generado por los disparos, suponemos que alguno de los
hombres de Henry, acudirá a revisar.
Tras unos segundos, que se
me han hecho horas, escuchamos voces procedentes de adentro.
— ¿Qué fue eso? —Un hombre
grita.
—No lo sé, pero vino de
afuera, y dicen que las cámaras no sirven.
Se escuchan pasos
acercándose.
— Shit!
— ¡El cerrojo! —se oye
sorprendido.
— ¿Cómo ocurrió eso?
Por las voces, creó que solo
son dos hombres los que han acudido. Muevo mi mano para señalarle a uno de los
chicos que avance, éste se vuelve con otros dos de mis hombres para indicarles
que se muevan con él.
Así que tres de mis hombres
se mueven silenciosamente hacía la puerta.
El chico a quien le he dicho
que se mueva, patea la puerta y esta se abre de inmediato, el otro chico abre
fuego sin dudarlo, se oyen algunos gritos y solo un par de disparos como
respuesta del ataque de mis hombres. El tercer chico entra mientras lo están
cubriendo. Después de algunos segundos, el hombre que entró sale a indicarnos
que podemos entrar.
Camino de inmediato hacía la
puerta, seguido de Haruki y Kirishima.
—Señor por favor no se
adelante —Kirishima habla, sin embargo no alcanzo a contestar pues un disparo
ha impactado cerca de mis pies.
— ¡Protejan al jefe! —varios
de mis hombres gritan.
La mayoría nos movemos hacía
el jardín, en medio de la lluvia de fuego que está cayendo sobre nosotros.
Escucho el grito de dolor de uno de mis hombres. Llego hasta a un árbol, con el
cual me cubro.
Busco con la mirada a mis
hombres y noto que el hombre que entró primero a verificar yace en el suelo,
con una parte del la cabeza destrozada, a lado de los cuerpos de dos de los
hombres de Henry. El hombre que escuche gritar, se está tocando el hombro, el
cual está sangrando. El hombre me mira y solo levanta su dedo pulgar para
asegurarme que está bien, confió en su palabra.
— ¡Necesitamos movernos!
—Haruki grita.
—Sigan con lo planeado
—ordeno, ya estamos aquí y no pienso irme sin Takaba.
Cinco de mis hombres se
dispersan por el jardín entre ellos Stuart, ellos rodearan la casa y se
encargaran de la limpieza de afuera.
Haruki, Kirishima y el resto
de ellos se mueven conmigo, hacía la entrada.
Los disparos se detuvieron
en cuanto entramos al jardín, los arboles nos están cubriendo bastante bien.
Mientras nos movemos escuchamos algunos disparos a lo lejos, deben de estar
atacando al grupo de Stuart.
Estamos cerca de la puerta,
me detengo para ver que el resto de los hombres este preparado para entrar.
—Me moveré primero — Haruki
dice, antes de salir corriendo hacia la puerta.
Una nueva oleada de fuego
cae en el camino que Haruki recorre, pero no logran detenerlo, él chico ha
llegado a la puerta.
—Lo tengo cubierto
—Kirishima me dice y noto que su arma está dirigida hacía el techo de la casa,
pues de allí es de donde hemos visto que salen los disparos. — ¡Ahora jefe!
—Kirishima me grita y salgo corriendo.
Haruki está listo para
disparar, si es que sale algún otro tirador. Se escuchan disparos mientras
corro.
Al llegar con Haruki miro
hacia Kirishima y veo como está movilizando al resto. En cuanto he llegado,
Haruki se prepara para abrir la puerta y nos sorprendemos al darnos cuenta de
que no está cerrada, pues se abre con solo bajar la manija del cerrojo.
Kirishima y los demás ya están
con nosotros y solo se ha escuchado un tirador, lo cual quiere decir que mi
secretario sigue teniendo muy buena puntería, aún cuando tiene poco que se ha
recuperado de sus quemaduras.
— ¿Señor? —Haruki me
pregunta mientras mantiene la puerta semiabierta, esperando mi orden.
—Adelante —le digo —ya todos
saben lo que tienen que hacer —les recuerdo y todos asienten.
En cuanto entramos, sentimos
una extraña vibra rodeándonos. Está casa parece vieja, iluminada tenuemente,
cómo si la luz, no fuera importante aquí.
La casa está en completo
silencio. Al aguzar el oído escucho algunos disparos y gritos afuera, deben de
ser mis hombres, sin embargo, este ruido parece tan ajeno a la atmosfera de la
casa, es como si el silencio se hubiera adueñado del lugar reclamándolo como
suyo, impidiendo que algo lo perturbe, incluso si ese algo es la muerte.
La casa parece vigilarnos, a
cada paso que damos sentimos que somos observados, haciendo todo muy incomodo.
Muevo mi mano para indicarles
que revisen abajo, tres de mis hombres asienten a mi señal y se alejan de
nosotros.
Todos tienen órdenes de
avisarme de inmediato, si encuentran a Takaba.
Nosotros corremos hacia arriba. Al subir las
escaleras, los tres nos detenemos a ver el pasillo que atraviesa este piso.
— ¿Señor? —Escucho a Stuart
por el audífono.
—Dime —contesto.
—Uno de los hombres de Henry
ha dado aviso, a su jefe —me dice preocupado.
—Sabíamos que está era una
posibilidad —le digo sin mostrar preocupación —Solo tenemos que apresurarnos,
no quiero arriesgar a Takaba, tenemos que sacarlo antes de que llegue.
—Entendido, entonces
seguimos con lo planeado.
—Así es. En cuanto alguien
tenga indicios de la llegada de Henry, avísenme.
—Entendido —Stuart me
contesta.
— ¿Todos me han escuchado?
—pregunto.
—Enterado —escucho a todos
mis hombres contestarme.
Veo que Haruki y Kirishima
me observan y asiente.
—Haruki encárgate de las
habitaciones del centro, Kirishima tu vas a la derecha y yo revisare el lado
izquierdo.
En cuanto termino de hablar,
los tres nos dirigimos a nuestros objetivos.
Camino hasta el fondo del
pasillo, que está cada vez más oscuro, justo así es como debe de ser la entrada
al infierno, oscura, fría, silenciosa, tratando de contener los gritos de dolor
de las almas condenadas… ¿esto será lo que me espera?
Alejo esos pensamientos de
mi mente pues ahora debo concentrarme en buscar a Takaba.
Camino, lento y con la
pistola preparada para disparar, mientras me desplazo siento el rápido palpitar
de mi corazón.
Me detengo en la última
puerta del pasillo, poso mi mano en el pomo y antes de que logre abrirla, uno
de mis hombres me habla por el auricular.
—Jefe, hemos encontrado a la
sirvienta, y se ha puesto como loca a llorar, tuvimos que noquearla para que se
calmara. ¿La sacamos o la dejamos en su habitación?
—Sáquenla, no sabemos qué
tan implicada esta en todo este embrollo, sin embargo de momento no es mi
enemiga.
—Entendido jefe.
Ahora que he terminado de
hablar abro la puerta.
—Shit!
Maldigo al momento de sentir
que algo o alguien me ha cortado en la pierna.
La habitación está
completamente oscura, no hay ni un solo indicio de que haya alguien aquí
adentro, pues todo parece estar completamente quieto. Y aún así puedo sentir
que alguien me está mirando.
Doy un paso adentro de la
habitación y con la mano busco a tientas encender la luz, al encontrar el
apagador y presionarlo, nada pasa, la luz no se enciende vuelvo a presionarlo
pero parece que no sirve.
Una punzada aparece, ahora
en mi otra pierna, mi muslo derecho está sangrando, por el corte que me han
hecho.
— ¡Muéstrate! —Grito sin
recibir respuesta, la habitación esta en completo silencio.
Y antes de que me dé cuenta
siento un nuevo corte, solo que esta vez he logrado detener la mano que ha
encajado el cuchillo en mi pierna, y casi al mismo tiempo siento unos dientes mordiéndome
tan fuerte que termino soltándolo, si no lo hubiera hecho me hubiera arrancado
un buen trozo de mano.
Disparo sin tener un
objetivo fijo, y no creo haberle dado a nadie pues no se oye algún grito o
quejido.
— ¡Jefe! —Escucho a
Kirishima gritar nervioso.
— ¡Estoy bien, este problema
lo puedo solucionar yo solo! —le explico para calmarlo y que siga con lo
planeado.
— ¡Jefe! ¡Lo encontré!
—vuelve a gritar y no se oye tranquilo.
Saco el cuchillo que sigue
clavado en mi pierna y lo tiro hacia afuera de la habitación.
—No estoy para juegos.
Al decirlo escucho los pasos
apresurados de alguien atrás de mí.
—Jefe, escuche los disparos
y vine de inmediato —Además escuche lo que Kirishima dijo —Haruki está parado detrás
de mí.
—Hay alguien aquí, es
peligroso y se mueve rápido —le explico rápidamente —encárgate de él.
—Entendido, ahora vaya con
Kirishima y saque al joven Takaba de aquí.
Sin dudarlo, salgo de la
habitación.
—Ten cuidado Haruki. La luz
no sirve y parece gustarle la oscuridad.
Le digo mientras me alejo de
él.
Mi pierna me duele con cada
paso que doy, pero esto no importa, corro hacía el final del pasillo y mientras
me acerco veo una enorme cruz que sin lugar a dudas es hermosa pero al mismo
tiempo es una sombría visión.
La voz de Kirishima llega a
mis oídos.
—Joven, ¿me escucha?
¿Qué ocurre? Mi mente está
alerta y preocupada, ¿por qué Kirishima pregunta eso?
Doy un paso más y por fin
estoy en el umbral de la puerta, pero en cuanto mi vista encuentra a Kirishima.
Todo de repente parece moverse apresuradamente.
La escena frente a mi es aterradora,
siento que mis piernas tiemblan, y doy un paso más hacia ellos.
La sangre ha teñido de rojo
todo a su alrededor, él está en medio de ese halo carmesí, que parece tenerlo
atrapado, como si fueran manos atrayéndolo, cubriéndolo, ahogándolo, sin
dudarlo, lo están sofocando, desean llevárselo, alejarlo de mi, y no quiero que
eso pase.
Kirishima consiguió tela, de
no sé donde, para atar las muñecas sangrantes de aquel cuerpo que de primera
instancia desconozco.
Me acerco a ellos y al
hacerlo, siento que en cualquier momento las piernas me van a traicionar y me
desplomare en medio de ese mar rojo.
Ese muñeco sin vida que
Kirishima sostiene, no puede ser mi Akihito, simplemente no puedo creerlo.
Me dejo caer cerca de ellos
y cambio de lugar con Kirishima. El cuerpo desmadejado de Akihito yace en mis
brazos, lo que por un mes he buscado ahora lo encuentro y siento que mi corazón
está a punto de romperse en mil pedazos.
Su cabello ha crecido, ya no
brilla como antes, su piel está pálida, sus labios están casi blancos, su
cuerpo está frío y extremadamente delgado, sus parpados están cerrados, no me
dejan ver esos pequeños luceros que guían mi camino, la luz que su presencia
irradiaba se ha extinguido.
No sé qué hacer, no quiero
verificar su estado, si lo hago y me doy cuenta de que mi mayor pesadilla se ha
hecho realidad, mi mundo entero se habrá acabado, no puedo imaginarme una vida
sin él, no quiero una vida sin él.
Escucho a Kirishima hablar
pero no se que dice, no me interesa.
— ¡Señor! —Kirishima me
grita, para llamar mi atención —él sigue con vida, solo que su pulso es muy
bajo, casi imperceptible, al igual que su respiración. Tenemos que sacarlo de aquí, ya he avisado a Stuart y él ha
llamado a una ambulancia, tenemos que apresurarnos.
— ¡Akihito! —susurro su
nombre, toco su mejilla y está tan fría.
Verlo así me mata, cierro
los ojos, y al hacerlo noto lo húmedos que están, mis mejillas se han mojado
con las lágrimas que se han escapado.
Mientras me sumo en mi dolor
siento el frío toque de un ángel, que ha posado su mano en mi mejilla,
inmediatamente abro los ojos.
— ¡Por fin viniste…! Gracias…
El susurro casi inaudible de
Akihito me sorprende y sin querer, más lágrimas se me escapan.
— ¡Akihito resiste! No te
atrevas a dejarme, no te permito morir… ¡Akihito! ¿Me escuchas?, no te mueras…
Suplico mientras su mano cae
sobre su escuálido cuerpo y sus ojos que se había entreabierto un poco, se
vuelven a cerrar.
— ¡Akihito!
Grito y escucho mi voz
retumbar en la habitación.
—Es un chico fuerte
—Kirishima lo dice para consolarme.
—La ambulancia esta cerca, tenemos
que bajar al chico y estar preparados para recibir a Henry, pues ya no debe de
tardar en llegar.
Stuart está frente a
nosotros, y al verlo noto que su rostro está sorprendido por la escena frente a
él.
Al pensar en lo que me ha
dicho, siento como el fuego que se había encendido hace un mes toma fuerza y se
extiende dentro de mí, justo ahora no puedo hacer nada por Akihito, él tendrá
que luchar su propia batalla, con ayuda de los médicos; y mientras yo luchare
la mía, haré lo que debí hacer hace un mes, matare a quién lastimo a mis
hombres, a quién se atrevió a lastimar a mi Akihito, mataré a Henry Smith.
Este año quiero iniciarlo molestando a mis queridos distraídos, y que mejor manera que una actualización corta de su historia favorita.
Dividí el capítulo porque... Porque si 😂😂 simplemente, no soy fan de los capítulos largos y bueno este hubiera quedado infinito 😂😂😂😂por eso decidí cortarlo. Habrá segunda parte en menos de lo que piensan, aunque dependerá de sus comentarios y actividad... Quieren regalo de reyes? Veremos como se portan 🤣🤣🤣🤣
OK, los quiero, comenten por fis.
See you soon my little guys 😘😘
Eowwww actualizaste!!!! Que emoción!!! Me encanta, me gustó muchísimo. Por fin no maten a Henry rápido. Tortura a la máxima potencia para él!!!! Asami al rescate y a la venganza. Aki debe lucha ahora y Asami debe estar con él para apoyarlo. Dicen que la gente en coma escucha, así que el Rey necesita darle a su príncipe una certera razón para vivir. Gracias me encanta 😻🥰
ResponderEliminarHola, gracias por leer y comentar.
EliminarMe alegra que te haya gustado y que lo hayas disfrutado. Como ves no me tarde en subir la segunda parte y espero leerte allí también.
Y tienes razón, Asami debe estar a lado de Akihito, justo ahora es cuando más lo necesita.
Cuídate mucho, see you later 😘
OMG!!!!! Que emoción. Me encanta. si!!!! Quiero regalo de los Reyes jejej, porfa actualiza pronto!!!!!
ResponderEliminarHola, me alegra que te haya gustado.
EliminarNo pude actualizar en Reyes pero no quería dejarlos sin la conti, así que tarde pero seguro. Espero leerte allí también.
Cuídate mucho bye😘😘
Estuvo super el cap me encantó quiero más más más cap .... gracias por acordarte ... fue l mejor regalo que me han dado 🥰 espero mi regalo de reyes que sea súper largo😍se te quiere 😜
ResponderEliminarMuchas gracias, me alegra que te haya gustado y espero leerte en el siguiente capítulo.
EliminarEstoy my feliz porque aun hay personas que esperan esta historia.
Cuídate mucho, bye 😘
¡¡Aaaaaaaaah!! Que emoción, por fin algo de acción, Asami tiene que hacerlo sufrir, cortarlo en pedacitos y tirarlo al río por hacerle daño al pobre de Akihito.
ResponderEliminarFeliz año para ti, gracias por el hermoso regalo 😘
Es idea mía o ese párrafo rimó?
EliminarY te apoyo, mucho sufrimiento para todo el q haga sufrir a Akihito
Muchas gracias por leer y comentar.
EliminarTodos quieren que Henry sufra, pobre. Espero haber cumplido sus espectativas.
Cuídate mucho, bye 😘😘
Omg😱 gracias es el mejor regalo, ya tenía ganas de saber más de mi fanfic favorito, espero que pronto tengamos más, muchas gracias
ResponderEliminarMuchas gracias a ti por leer y comentar.
EliminarMe hace feliz saber que aún no han olvidado mi historia.
Muchísimas gracias.
Cuídate mucho, bye 😘
Santa madre de Dios, mis manos están temblando y mi kojoro se quiere salir de mi pecho; al menos Asami ya tiene en sus manos a Takaba, ahora solo le falta matar a ése maldito desgraciado
ResponderEliminarMe encantó este capítulo, mi alma está más tranquila
Muchas gracias por leer y comentar.
EliminarTodos uieren hacer picadillo a mi querido Henry, por qué será?
Me alegra que te haya gustado y espero leerte en la actu.
Cuídate mucho, bye 😘
Muchas gracias, por fin te apiadaste de nuestras pobres almas
ResponderEliminarJajaja jajaja
EliminarGracias a ti por leer y comentar.
Espero te haya gustado y espero leerte en el siguiente capítulo.
Cuídate mucho, bye 😘
Holiii
ResponderEliminarBueno como te decia, este capitulo ya lo habia leido pero no lo saboree y disfrute como se debia
Ahora si...
Como siempre adoro la manera de describir las escenas situaciones etc
Una pregunta Lucky tiene complejo de gato o perro, porque es el quien ataco a Asami!