Trato hecho

Día 8: oso de peluche. 




—Eli, te extraño —se escucha como un niño berrinchudo.
—Yo también te extraño Fer —lo digo en voz baja.

—No te escuche, ¿repitelo por favor? —me pide y escucho su risita burlona.

—Estoy por comenzar, ya no puedo hablar, Fer— le susurró.

—Está bien mi lindo conejito, estoy llegando al departamento —se escucha el ruido del ascensor abriendo —Voy a cambiarme y a tomar una cerveza mientras te veo en la TV.

—Deja de presionarme, es suficiente con mis nervios—le digo aun susurrando.

—Lo vas hacer bien, solo divierte —Lo dice seriamente.

—Gracias, te amo mi lindo osito de peluche —odia que le diga así pero él comenzó con lo de conejito.

—No voy a pelear por teléfono —me dice con un falso tono de molestia —Me llamas cuando termines, iré por ti.

—Obviamente no, nadie debe vernos juntos—ya hemos hablado de esto pero el es muy necio.

— ¡Elian! —grita y ahora si está enojado—odio estar en el closet —lo escuchó pero al mismo tiempo me llaman para avisarme que ya voy a entrar.

—Lo siento Fer, tengo que irme.

Le cuelgo sin darle tiempo a replicarme nada. 

Apago el celular y lo guardo en mi saco. 

Soy presentado y al escuchar mi nombre paso. 

El presentador es Armando, el cual tiene uno de los programas más famoso e importantes del medio del espectáculo. Fui invitado para hablar sobre mi programa de radio, que actualmente es uno de los más escuchados. Muchos dicen que así como Armando es el rey de la TV, yo sería su paralelo en la radio. 

Por lo que muchos consideran está una ocasión especial. 

La entrevista se lleva a cabo de manera ágil y divertida, ambos reímos de nuestros comentarios y obviamente le extiendo una invitación a mi programa, es lo que se espera de mí y al hacerlo en vivo, el no se puede negar como ya lo ha hecho antes. 

Después de mi turno llegan los demás invitados, entre las que hay dos actrices jóvenes y muy hermosas. Al final ha venido un chico por el cual todas las chicas del foro gritan emocionadas, él es el rival de Fernando, ambos son cantautores, regularmente se pelean el primer puesto en la lista de canciones más sonadas.

Darío es el líder de su grupo pop, sus canciones románticas y melosas tienen una gran aceptación entre las personas, sobretodo en mujeres. 

Al llegar Armando se concentra en charlar con Darío, y antes de invitarlo a que pase a cantar, Armando le pregunta, ¿qué tipo de chica le gusta? 

Él evade la pregunta diciendo que no le importa como se ven, que lo importante es su personalidad. 

Armando presiona y le dice ¿qué si saldría con alguna de las aquí presentes? 

—Sí lo haría —Darío contesta seguro. 

Todas las personas en el foro gritan emocionadas y él les sonríe coquetamente. 

— ¿Con quién saldrías? —Armando pregunta y espera a que él conteste. 

Darío ve el público y después mira a las actrices a mi lado, sonrió divertido pues parece no querer salir con nadie. 

—Con Elian, él parece ser alguien con quien reiría mucho. 

Algunas de sus fans en el público ríen y otras se quedan calladas por la impactante respuesta . Mi sonrisa de antes se ha desvanecido y me he sonrojado.

Armando también está sorprendido. 

—Claro, sí fueras una chica saldrías con Elian, y quién no, si es un joven apuesto, inteligente y divertido—dice a modo de justificar la respuesta de Darío. 

Yo sonrió incómodo al escucharlo. 

— ¿Por qué debería de ser una chica, para salir con él? —Darío pregunta. —Creo que es un buen candidato, sin importar si soy hombre o mujer, en la actualidad ya no debería de importarnos esa nimiedad. 

Armando se ve claramente nervioso, Darío por el contrario se ve tranquilo. 

—No pensé que yo fuera tu tipo —digo en tono socarrón. Trato de aligerar la atmósfera, las actrices se ríen al escucharme. 

—¿Dónde nos apuntamos para salir contigo? —me pregunta una de ellas. 

Y yo río al escucharla. 

—No sabía que fuera un programa de citas, debí vestirme mejor—todos ríen y Darío y Armando se unen a las bromas, de tal manera que el momento incómodo se olvida… Por lo menos durante lo que queda del programa. 

Darío canta y en su última canción todos nos unimos al grupo en el escenario, de esta manera se despide el programa. 

Todos los invitados nos despedimos allí mismo mientras las cámaras aún nos están grabando y transmitiendo. 

Darío se me acerca y me da un abrazo, al hacerlo me susurra en el oído: lo siento. 

Al escucharlo solo asiento y me separo de él. Seguimos despidiendonos y el programa termina la transmisión. 

Nos despedimos del grupo y salimos del escenario. 

Ya en los vestidores Darío me va a buscar. 

—Lo siento, Elian no era mi intención incomodarte. 

—Para no tener la intención lo hiciste bastante bien —le digo y lo miró molesto. 

—Lo siento enserio —Darío se ve avergonzado. 

—Esto va a volverse un escándalo, seguramente mañana mi teléfono no dejará de sonar pidiéndome mi opinión sobre lo que dijiste. Conseguiste lo que querías, publicidad gratis para tu nuevo álbum. 

—No digas eso, mi intención no era esa. 

—Sí, tu lo dices—le contestó irónicamente. 

—Créeme Elian, hasta ahora no he necesitado ese tipo de publicidad ¿por qué la buscaría ahora? 

Al decirlo se acerca a mi y uno de sus brazos se pone en mi hombro, mientras el otro se posa en la espalda. 

— ¡Darío basta! —le digo enojado.

Él sonríe y acerca su rostro al mío, yo lo empujó y él se aleja solo un poco. 

—No me digas que ya me has olvidado —al decirlo intenta robarme un beso— ¿acaso ya sales con alguien? 

Esto puede parecer raro pero tengo una debilidad con los cantantes, Darío y yo salimos hace mucho, aunque solo fue por unos meses, ni siquiera creo que tuviéramos una relación sería, yo lo definiría como una serie de encuentros sexuales, en los que ambos nos divertimos. 

—Eso es algo que no te importa, sin embargo te voy a contestar. Si actualmente salgo con alguien y es una relación seria, así que deja de jugar conmigo. 

Darío pone mala cara pero se aleja de mi. 

—¡Qué mierda! Pensé que podríamos divertirnos esta noche juntos. 

Lo miro y recuerdo esas noches de sexo y no niego que eran geniales. 

—Lo siento… 

No termino de hablar pues la puerta se abre. 

—Vine a recogerte —ambos nos volvemos a ver a quién à llegado y noto la cara de sorpresa que Darío pone al ver a Fernando, quien por cierto luce su rostro rojo y su respiración agitada.

— ¿Sales con él? —Darío me pregunta sorprendido. 

Ambos me miran esperando mi respuesta. Tomo mi bolso y Fer me lo quita de las manos. 

—Sí, Fernando y yo estamos saliendo—le contestó seriamente. 

El mencionado parece enorgullecerse de lo que he dicho y mira con suficiencia a Darío. 

—Ya veo, entonces pospondremos lo de hoy para después, cuando te aburras de él, puedes buscarme, sabes donde encontrarme. 

El comentario mordaz de Darío enoja a Fer y cuando él intenta contestar yo lo impidió dándole un beso, largo y profundo. 

Darío chasquea y se acerca a la puerta. 

—Ya entendí, no tenías que hacer eso. 

Sin decir más se sale de la habitación. 

Me separó de Fernando, le quito mi bolso y me saldo. 

Fernando parece desconcertado por todo lo ocurrido, me sigue sin decir nada y cuando llegó al estacionamiento le pregunto por su auto y él dice que llegó en taxi. Así que ambos llegamos a mi auto. 

Antes de subir, me quita mis llaves y me abre la puerta del copiloto, subo sin objetar y él se da la vuelta para subirse. 

— ¿Eli… —Me mira con sus ojos de perrito regañado. —me perdonas?

—Te dije que no vinieras, no confíaste en mí y viniste. 

—No fue eso —me dice con la cabeza agachada. 

— ¿No?¿ Entonces que fue? 

—Darío te veía como si está noche no te le fueras a escapar —su voz suena enojada —y lo que menos deseo es que te pase algo desagradable. 

—No soy una adolescente indefensa y sé exactamente cómo es Darío. Todo estaba bajo control. 

—Lo siento Eli, perdoname, es que ese hombre me pone de muy mal humor y verte sonreírle me enfureció. 

Al ver que realmente parecía estar celoso, me rendí y lo abrase. 

—No seas tonto, mi relación con Darío ya es cosa del pasado, tu eres mi presente y así quiero seguir. 

Él sonríe al escucharme y me besa, solo dejo que pase unos segundos antes de empujarlo. Fer parece molesto y yo miro en todas las direcciones para asegurarme de que nadie nos haya visto. 

—No te importa que Darío haya dicho en cadena nacional que le gustas pero si te preocupa que te vean besándote con tu novio. 

Fer me reclama. 

—Lo de Darío solo fue un juego tonto, y mañana tendré que lidiar con las consecuencias, y no quiero ni imaginarme si la prensa se entera que me vieron besándome con el principal rival de Darío. 

Fer aun me veía molesto. 

—No me gusta que mi vida privada se haga pública, pero si tanto te importa, haremos pública nuestra relación, pero por favor espera a que lo de Darío pase. 

Fer parecía estar sopesando mi oferta. 

—OK, aceptó, siempre y cuando me acompañes como mi pareja a la entrega de premios en Miami —lo miro sorprendido por la invitación pues ese era uno de los eventos más importantes que había en el mundo de la música. 

—OK, eso será un escándalo tremendo. 

Él me mira feliz y solo con verlo, mi preocupación desaparece. 

—Te amo conejito —Fer dice sonriendo felizmente. 

—Te amo mi osito de peluche. 

Le digo y él me sonríe , al parecer nada de lo que diga le va a quitar su tonta sonrisa. 

Enciende el auto y salimos de la Televisora. 



Comentarios

  1. Super amoroso, me encanta lo bien que se llevan y la confianza para hablarse cariñosamente, como osito, patito, pollito y cosas así.


    Gracias por la dosis de azúcar.

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