Hojas de otoño. Capítulo 16.

Rencor  

Feilong va controlando, poco a poco, su estupefacción y su rostro cambia a una falsa tranquilidad.

—Podría decir lo mismo si supiera tu nombre —Contesta con voz controlada.

Nuestros hombres están evidentemente nerviosos y esperando solo una orden para desenfundar sus armas. Sin embargo prefiero ver cómo se van dando las cosas antes de hacer algún movimiento.

—Muy cierto. Discúlpeme, no me he presentado, y también estoy curiosa por saber ¿quién es el hombre que lo acompaña, ya que no parece ser un subordinado? —La mujer se pone de pie y tiende su mano cordialmente a Feilong —. Soy la hija de Pietro Ricci, Gianella Ricci.

Los hombres de la mujer están alertas a cualquier movimiento extraño que haga cualquiera de nosotros. La atmosfera se ha vuelto tensa.

—Un gusto conocerte Gianella Ricci —contesta educadamente.

Feilong estrecha su mano con la joven dama, que por cierto luce muy atractiva, tras soltarse ella dirige su mirada hacía mí.

—Mi acompañante es Asami Ryuichi un… socio japonés —Gianella me tiende su mano con total confianza.

—Un gusto conocerla señorita —siento su mano cálida y me da un ligero apretón, no titubea en ningún momento, su sonrisa podrá ser falsa pero la mantiene. Ella está acostumbrada a este tipo de reuniones.

Su constitución pequeña y esbelta concuerdan con su apariencia juvenil y delicada, las altas zapatillas que usa hacen que no quede tan debajo de nosotros, por lo que no tiene que subir demasiado su rostro para vernos a los ojos. Su traje sastre de dos piezas la hacen ver formal y seria, y los lentes rectangulares dotan a su mirada café de inteligencia además de cierta suspicacia, de alguna manera este mundo te vuelve así.

—Lo mismo digo. Por favor tomen asiento. ¿Gustan algo de beber? —nos pregunta mientras todos nos sentamos.

Desabrocho mi saco y lo abro para estar más cómodo.

—Un martini —Contesta Feilong.

—Un whiskie —pido y miro a la chica de cabello castaño frente a nosotros. Su cabello esta cuidadosamente recogido en chongo y parece que buscó, con gran detalle, dejar algunos cabellos sueltos de tal manera que enmarcan su pequeño rostro.

—Agua por favor.

Uno de sus hombres de inmediato se mueve para atender a nuestras órdenes.

Haruki y Kirishima permanecen de pie a solo unos cuantos pasos de mí y los hombres de Feilong hacen lo mismo.

—No bebo alcohol, solo en ocasiones especiales —nos comenta la chica y esboza una sonrisa como disculpa —. Ya que nos hemos presentado, me gustaría saber el porqué de nuestra reunión. Yo atendí a tu petición de reunirnos como un favor especial, sin embargo no me quedó claro el porqué —. Gianella se dirige a Feilong, quién parece estar pensando en cómo abordar el tema.

—Agradezco la atención, sin embargo no sé si me podrás ayudar. Tu padre en otras ocasiones me ha hecho algunos favores y claro yo he correspondido los he correspondido, pero no sé hasta qué punto podrías serme de ayuda.

—Sé el tipo de información que mi padre maneja y cómo la consigue, así que se puede decir que tengo los mismos recursos que él —. La chica interrumpió a Feilong y esté pareció darse cuenta de que su comentario no fue muy acertado.

—Lamento si te ofendí, pero no era mi intención.

—No te preocupes no me ofendiste, de hecho estoy acostumbrada a ese tipo de comentarios, desde que tome el negocio en mis manos he recibido muchas críticas, supongo que no es común que una mujer este a cargo. De hecho mi propio padre no deseaba que yo heredara su puesto, sin embargo después de todo lo ocurrido nadie más podría tomar su lugar.

—Me entere de lo sucedido y lamento todo por lo que han pasado. Sin embargo supe que tu padre había sido dado de alta y como nuestros negocios no se han detenido supuse que él ya estaría trabajando de nuevo. Por eso me atreví a pedir esta reunión.

—Ya veo. Pues lamento comunicarte que mi padre falleció hace unos días, sin embargo no he dejado que el rumor se esparza y en su lugar dije que había sido dado de alta. El ataque que sufrimos no fue solo una accidente o error, sino un ataque premeditado contra mi familia y se quién está detrás de él, solo estoy esperando para corresponder la atención, porqué su muerte no se quedará sin vengar —. La voz fría y la mirada envenenada de la chica demuestran el odio que alberga su corazón.

—Mi más sentido pésame no estaba enterado. Si puedo ayudarte en algo cuenta con ello —. Feilong parece sorprendido al enterarse de lo ocurrido.

—Ya has sido de mucha ayuda, al no abandonar nuestros negocios. Muchos de nuestros contactos, al saber del ataque a mi familia lo tomaron como una advertencia y decidieron hacernos a un lado, nos dejaron solos y eso no se los voy a perdonar —. La chica está sentada con las piernas cruzadas y una de sus manos descansa sobre su rodilla, al ir hablando veo como aprieta con fuerza su rodilla demostrando así su frustración y coraje—. Por eso dije que era un favor especial hacía ti, ya que con nadie más he aceptado reunirme, no ahora.

—Pues lo agradezco.

Feilong calla mientras ponen nuestras bebidas en la mesita frente a nosotros. Gianella toma de su agua en cuanto se la dan.

—Srita. Gianella lamento todo por lo que está pasando y lamento aún más incordiarla con mis problemas. Sin embargo no puedo acudir a nadie más para pedirle este favor.

—Pues te escucho —contesta seria.

—Hace algunos días… para ser exactos hace 18 días. Un gran amigo, Takaba Akihito, fue secuestrado. La policía dice que está desaparecido y no saben nada de su paradero. Asami estaba con él cuando este tipo los ataco, primero separo al chico de Asami y después hizo explotar una bomba para intentar matar a mi socio junto con sus hombres, solo que lograron escapar, aunque eso no impidió que se llevaran a mi amigo.

Feilong cuenta todo, lo más simple posible, sin dar muchos detalles.

—Ya veo. Por lo que entiendo el Sr. Asami pudo ver quién lo secuestro —afirmo y su mirada recayó en mi.

—Así es. Un hombre apodado el rey blanco, secuestro a mi… familiar —por un momento pensé en decir la verdad sobre Takaba pero ella no necesita saberlo.

—Henry Smith —Gianella pronuncio el nombre lentamente. Así que sabe de quién hablamos, pues conoce su nombre— ¿Cómo es que se involucraron con él? —pregunto. 

La chica extendió su mano hacía uno de sus guardaespaldas y este de inmediato saco una cigarrera plateada y se la dio.

Gianella nos ofreció un cigarrillo, Feilong no lo acepto y yo opte por tomar uno. Saque mi encendedor y se lo ofrecí, ella lo tomo y después de usarlo me lo devolvió.

—Takaba trabaja de fotógrafo en Japón y vino a realizar un reportaje sobre los conciertos en Chicago. Al parecer ese tal Henry quedo encantado con Takaba, de lo contario no sé por qué lo secuestro —.

Gianella me mira fijamente a los ojos por algunos segundos, le sostengo la mirada hasta que esta termina por volverse hacía Feilong.

— ¿Qué es exactamente lo que desea de mi Sr. Feilong? —Ella le pregunta mientras exhala el humo del cigarrillo.

—Deseo saber en ¿dónde tiene a mi amigo ese tal rey? —contesta.

Ella esboza una sonrisa, antes de llevarse a los labios una vez más el cigarrillo, tras inhalar y exhalar, bebé un poco de agua.

—La información que piden es muy difícil de conseguir…

—Pero no imposible —Feilong la interrumpe —y menos para alguien como la familia Ricci —Ella sonríe abiertamente.

—Solo dije difícil. De conseguirla ¿están dispuestos a pagar por ella? —Gianella deja caer la ceniza de su cigarrillo en un cenicero de cristal que esta sobre la mesa.

—Solo diga el precio, no importa la cantidad, pagaré por ella, siempre y cuando sea verídica —contesto seriamente.

Bebo mi whiskie y su mirada inescrutable se posa de nuevo en mí.

—“No importa la cantidad”—me cita y su ceja derecha se eleva mientras me mira — ¿tan importante es su “familiar”? —me pregunta antes de dar una calada más a su cigarrillo, el cual está por terminarse.

— ¿Importa? —contesto con una pregunta, no deseo dar explicaciones sobre mi relación con Takaba.

—No en realidad, no importa —contesta y mira de nuevo a Feilong, quién está por terminar su bebida.

— ¿Conseguirá la información? —la insta a contestar.

—Puedo conseguirte la información, sin embargo deseo algo a cambio.

—Solo pon la cantidad —la interrumpo.

—No es dinero lo que deseo —ella restriega lo que queda de su cigarro en el cenicero —. Les dije que mi padre fue asesinado, sin embargo no fue el único, mi hermano y mi madre también fueron atacados. Mi hermano murió la misma noche en que fue atacado y mi madre sobrevivió gracias a uno de sus guardaespaldas que pudo protegerla. Yo no sufrí ningún atentado gracias a que no estaba en el país, y seguramente quién ataco a mi familia no sabe de mi existencia gracias a que llevo los apellidos de mi madre. Cómo dije mi padre no deseaba involucrarme en este mundo. En cuanto me entere de lo ocurrido vine y fue devastador encontrar a mi padre al borde de la muerte; él alcanzo a contarme quién los ataco y cómo fue que mato a mi hermano en frente de él. Poco después cayó en coma y ya no despertó.

La chica guardo silencio, bebió de su agua y remojo sus labios, antes de seguir hablando.

—Quiero a la maldita zorra que mato a mi familia —lo dijo fuerte y claro —. ¿Ustedes están dispuestos a pelear por su familiar, incluso si eso conlleva matar al rey?

—Nada me haría más feliz que quitarle la vida con mis propias manos —afirmo.

—Ya veo, me alegra escuchar esa respuesta. Quién mando a matar a mi familia fue Henry Smith, al parecer él creyó que nuestros negocios estaban interviniendo con los suyos, así que prefirió desaparecernos. No solo mato a mi padre y hermano, también masacro a la mayoría de nuestros hombres y quemo nuestro negocio principal. Él uso a mi familia para dar un ejemplo al resto de las organizaciones, sin embargo se equivocó y ahora se arrepentirá.

Feilong me mira de soslayo y parece evaluar la situación.

—Yo les daré la información que quieren y dejaré que mates a Henry, pero a cambio quiero que me entreguen a la maldita perra que mato a mi padre y hermano, quiero a esa tal Natalie viva, mi madre desea saludarla y yo deseo verla sufrir tanto como lo hizo con mi hermano.

Su voz es fría y su mirada brilla por el deseo de vengarse.

—Trato hecho —Contesto sin pensarlo.

—Sé que ella no tiene familia. Me han informado que cuida de un niño, pero no es de ella, aún no estoy segura de quién es, pero no pienso involucrar a un pequeño que no lo merece. Así que me conformo con tenerla a ella.

—Perfecto Gianella, creo que mi socio y yo estamos de acuerdo en el pago, solo nos queda definir ¿cuándo tendremos la información? —. Feilong le pregunta y ella bebe de su vaso.

— Supongo que les urge saber la ubicación de su amigo — la chica saca su celular y empieza a teclear en la pantalla táctil —. En cuanto mi padre me dijo lo que había ocurrido empecé a buscar personas que aún fueran fieles a nuestra familia, así fue como algunos de estos hombres se infiltraron en el grupo del rey —ella continuaba tecleando —. Ellos son los que me mantienen informada. Sí en verdad el rey ha secuestrado a tu amigo, mis hombres sabrán dónde está, sin embargo puedo tardar en hablar con ellos, dado que tenemos que tener cuidado de que no sean descubiertos —por fin dejo de teclear y tras guardar su celular mira a Feilong—. Justo ahora le he mandado un mensaje a uno de ellos para que se comunique conmigo y en cuanto él me contacte le preguntaré sobre su amigo. Sí el tiene la información pues los contactare de inmediato, pero cabe la posibilidad de que él no lo sepa y que tenga que hablar con alguno de los otros chicos, lo cual tardaría más. En cuanto sepa algo me comunicaré con usted señor Feilong.

—Preferiría que me llamaras a mí —Feilong me ve molesto pero lo ignoro —.

—Por mí no hay problema, deme su número.

Sin darme tiempo a contestar, Kirishima saca de su saco una tarjeta de presentación, supongo que mía y se acerca a Gianella, noto cierto nerviosismo en sus hombres al verlo caminar hacía su jefa, y ella acepta la tarjeta.

—Ok, entonces le avisaré a usted primero, Sr. Asami —. Gianella mira la tarjeta —no sé japonés pero… —guarda silencio mientras gira la tarjeta —que hábil poner la información también en inglés —. Sonríe, tras darle una mirada más a la tarjeta mira a Feilong—. Entonces por el momento sería todo, a menos de que haya algo más de lo que deseen hablar —se interrumpe para pasar su vista de Feilong a mí.

—Gianella solo nos queda agradecerte el que hayas aceptado ayudarnos…

—Más que una ayuda lo considero una especie de trabajo en equipo, en el cual todos saldremos ganando o eso espero.

—Claro, así será —contesta Feilong, y Gianella nos regala una tétrica sonrisa.

Tras despedirnos de la joven chica, algunos de sus hombres nos acompañan hasta que subimos al auto.

Feilong no dice nada durante el viaje yal llegar a mi hotel, antes de que baje, él me pregunta:

— ¿Veras a Yoh?

—No, prefiero que sigamos manteniendo nuestra comunicación a distancia, por lo menos hasta que todo esto termine.

Feilong se muerde el labio al escucharme, pareciera querer preguntarme algo pero se contiene.

—Háblale, no creo que haya algún problema.

—No tengo nada que hablar con él —contesta rotundamente.

—Estaremos en contacto, ni creas que me dejaras de lado en este asunto, vine por Akihito, no por ti, así que sí no deseas que actué por mi propia cuenta, me mantendrás informado de lo que harás y me incluirás en tus planes.

Su voz actitud me deja claro que ha venido a participar no a ser un simple espectador.

—En cuanto ella me llame, comenzaremos los planes para actuar y sí te llamaré —contesto un poco renuente a que me ayude.

—Perfecto, entonces nos vemos —al decirlo uno de sus hombres ya ha abierto la puerta del auto invitándome a bajar.

—Adiós —bajo del auto y mis hombres me acompañan.

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Hola mis lindos distraídos.

Ok, me odian lo sé casi puedo leer sus comentarios: "Keyla de nuevo con otro aburrido capítulo" "Carajo, Keyla ya reencuentra a Takaba con Asami" "Keyla deja de meter tanta paja a la historia"... en fin, que no me molestan, en serio chicos no me estoy quejando solo que mi tercer ojo de escritora  me dice que muchos de ustedes piensan esto y están en su derecho, solo espero que aún cuando se quejen comenten y me hagan saber lo que piensan de la historia. Ya dije que el final está cerca? creo que no, pues chicos el final está cerca.Y la acción comienza... habrá muertes y muchos gritos XD que emoción daré rienda suelta a mi lado sádico y mi amor por el gore saldrá a flote XD

Estoy segura que todos desean que está historia termine y por una parte yo también lo deseo, aunque la voy extrañar mucho.

Los quiero mis lindos acosadores,comenten.

See you soon :)