Game over. Capítulo 10.


 Nervios.

 


— ¿Tetsu? ¿Sigues allí? —La voz grave del hombre al otro lado del teléfono sonaba nerviosa.


— ¿Cómo conseguiste mi número?

—Eso no importa. Haré todo lo que sea necesario para que nos veamos y hablemos de nuevo —él hombre hablaba con tal seguridad que Kuroko sintió un escalofrío recorriéndolo.

—Te lo dije, no tenemos nada de qué hablar, así que deja de buscarme —Kuroko estaba sorprendido por la tenacidad que estaba mostrando —.  ¡Aomine deja de buscarme!

—Claro que no, sabes muy bien que tenemos que hablar de lo que sucedió hace quince años. Necesito decirte lo mucho que me has hecho falta.

—No sé de que hablas. Tú fuiste el que rompió nuestra relación, así que no me vengas con tus tonterías. ¡Déjame en paz! —Kuroko sintió que una inusual rabia lo invadía.

— ¡Mamá nos vamos, papá muere de hambre! —Kioshi entro a la habitación gritando.

—Kioshi no grites puedes molestar a los demás —Kise lo regaño.

Kuroko miro con cierto terror a los dos hombres que entraron en la habitación.

—Tetsu ¿quién habla? —Aomine pregunto sorprendido por lo que escucho — ¿Quién es ese chico? ¿Estás casado? —siguió preguntando.

—Te lo dije no tenemos nada de qué hablar, así que no vuelvas a llamarme —Kuroko le contesto aterrado de que él hubiera escuchado a su familia.

—Espera…

Kuroko no llego a enterarse que más iba a decir Aomine pues colgó.

— ¿Quién era? —Kioshi le pregunto a su madre, quien se notaba bastante alterada.

—Nada hijo, solo fue un número equivocado —contesto nervioso.

—Pues si estás listo, vámonos que muero de hambre —Kise impidió que su hijo siguiera cuestionando a su madre.

Los tres salieron de la universidad. Kise los llevo a cenar a un restaurante familiar. Kio tuvo que comer una comida que pareció no disfrutar mientras que Kuroko y Kise disfrutaban verlo sufrir.

La noche pasó sin más llamadas extrañas, gracias a que Kuroko bloqueo el número celular de Aomine. Aunque le preocupaba que siguiera insistiendo en llamarlo.

Por la noche cuando yacía en su cama, pensó en que tenía que hablar con su hijo, antes de que algo más pasara.


Por la mañana Kioshi se apuro a terminar su tarea pues sabía que su padre pasaría por los dos para llevarlos al partido de basquetbol y aunque no deseaba ir, sabía que no podría evitarlo.

— ¿Mamá, ya conoces a Kasamatsu? —Kuroko que estaba escribiendo, en la computadora, un ensayo para su clase despego la mirada de la pantalla y miro por encima de sus gafas a Kio.

—No ¿quién es? —contesto y Kio cerró su libreta y comenzó a guardar sus cosas.

—Termine todo, no sé si este bien pero lo logré —levanto sus manos y estiro su pecho, todo lo que pudo.

Kuroko lo miraba esperando la respuesta.

— ¿Es algún amigo tuyo? —pregunto curioso por averiguar.

—No, es el nuevo asistente de papá —contesto. Continúo recogiendo sus cosas —. Ayer me lo presentó, pensé que Stephen viajaría con él pero papá me dijo que por asuntos personales no había venido y que se quedo en Estados Unidos, así que su agencia le consiguió a Kasamatsu Yukio.

—Umm… ya veo —Kuroko contesto y volvió a su escrito.

—Parece alguien agradable aunque también es muy irritable, a papá le grita mucho, cada vez que él no hace lo que le dice o cuando se pone a platicar con las personas, además le da algunos golpecitos… fue muy divertido verlos discutir, es como si fueran esposos… —de repente de quedo callado, Kioshi sintió que había dicho algo fuera de lugar.

Kuroko lo había estado escuchando y su repentino silencio lo sorprendió.

— ¿Qué pasa?

—Nada, es solo que no quiero que pienses que papá está interesado en ese hombre o viceversa, solo tiene una relación de trabajo —el chico explico.

—Kio, tu papá tiene derecho a salir con quién desee. Mi amor por Ryōta no es del tipo de pareja, mi amor es uno del tipo fraternal, así que no me pondré celoso porque salga con otra persona. Él y yo somos solo buenos amigos, no estamos saliendo como pareja.

—Porqué tú no quieres —Kio contesto un poco molesto por la reacción de su madre.  

Kuroko no deseaba hablar de ese tema de nuevo, así que dejo pasar el comentario de su hijo.

—Así que Ryōta tiene alguien que le jale las orejas eso es bueno. Creo que Kasamatsu me va agradar.

Al terminar de hablar, Kuroko se concentro en su trabajo de nuevo, Kio por su parte llevo sus cosas a su habitación.

Después de algunas horas más Kise llegó corriendo a recoger a su familia.

—Papá ¿por qué pareces tan agitado? —Kio le pregunto mientras se ponía el cinturón de seguridad, en el auto de su padre.

—Me escape de las garras de Kasamatsu —una enorme sonrisa acompaño el comentario.

— ¿Eso no afecta tu trabajo? —Kuroko pregunto.

—Para nada, ya había terminado lo que me correspondía. Kasamatsu deseaba que leyera una nueva propuesta pero eso lo puedo hacer mañana. Seguramente mañana me tocara aguantar su cantaleta de la responsabilidad y blah blah blah…

Sonrió de nuevo y después arranco. 

Kuroko rió al escucharlo hablar. Mientras Kioshi conversaba tranquilamente con su padre, Kuroko movía sus manos nerviosamente y se miraba por el espejo retrovisor, revisaba que su cabello estuviera bien arreglado, por momentos notaba que Ryōta lo miraba de soslayo y esto lo incomodaba.

Al llegar y tras estacionar el auto, Ryōta condujo a la pequeña familia hasta la entrada del pequeño deportivo. Dentro del establecimiento Kuroko vio que el lugar tenía una cancha de basquetbol rodeada de un par de gradas, y en ellas había algunas personas observando el partido que se estaba llevando a cabo.

—No está, mejor vámonos —Kioshi murmuro, sus padres lo escucharon pero prefirieron ignorarlo.

Era obvio que el pequeño Kioshi no deseaba encontrarse con la familia de Murasakibara y por eso no hacía el intento de buscarlos.

— ¡Por fin llegaste! —la estruendosa voz de un hombre, llego a los oídos de Kuroko.  

Kuroko se giro sobre sus pies y pudo ver al enorme pelirrojo que se le acercaba con los brazos levantados y con una clara expresión de felicidad en el rostro.

—Kagami… mm… hola —contesto tímidamente y sintió que su corazón latía desenfrenadamente.

¡Por dios!, ¿desde hace cuanto tiempo no sentía su corazón tan vivo? Kuroko se pregunto, pues el solo ver a ese enorme hombre lo emocionaba… ¿esto es a lo que llaman amor a primera vista? Las interrogantes seguían apareciendo en su mente.

Kioshi miro el rostro sonrojado de su madre e inmediatamente miro a su padre que se mostraba ligeramente molesto.

—Taiga, por favor llámame Taiga —lo corrigió al tiempo que estrechaba la mano de Kuroko —me alegra que hayas venido, por un momento pensé que tal vez no vendrías —.

Kuroko aún con su mano atrapada entre la de Kagami contesto: —Te dije que vendría, yo nunca falto a mi palabra —su voz tembló un poco, pues era consciente del calor que le transmitía el tacto de Kagami.

—Cierto —contesto y con cierta renuencia soltó la mano de Kuroko, al escuchar el chasquido de la persona parada a lado de él —.

—Ahhh… lo siento, no te he presentado al papá de Kioshi —Kuroko hablo al recordar a su acompañante.

—Kise Ryōta, padre de Kioshi —el aludido se presento e hizo una reverencia.

—Oh mucho gusto, Kagami Taiga tío de Murasakibara —contesto el pelirrojo y correspondió el saludo de la misma forma —.

Kagami parecía querer preguntar algo pero Kioshi no se lo permitió.

—Buenas tardes señor Kagami —Kioshi saludo igual que su padre.

—Hola Kioshi —contesto Kagami y sonrió al chico, quién se mantuvo serio.

— ¿Los chicos que están jugando son tu equipo? —su pregunta era para distraer a Kagami de la extraña actitud que Kio había adoptado.

—No mis chicos están afuera calentando —contesto.

—Disculpe, señor Kagami, ¿podría decirme si los padres de Murasakibara Shouta están presentes? —Ryōta pregunto seriamente, y de esta manera quería alejar la mirada voraz de Kagami de su querido Kurokocchi.

—Si lo están, ellos no se pierden ni uno solo de los partidos de sus hijos —Kagami miro como Kise estaba de pie atrás de Kuroko, y aunque tenía una postura protectora hacía la joven madre, Kuroko parecía ignorarlo.

—Ya veo. Entonces ¿podría indicarme dónde están? Deseo hablar con ellos —Kioshi se removió nervioso al lado de su madre.   

—Claro, los llevo —contesto y con la mano los invito a seguirlo.

Kagami le dio un rápido repaso al cuerpo de Kuroko, haciéndolo sentir nervioso pero contento.

Caminaron lentamente por las gradas y cuando Kuroko intento caminar a la par de Kagami, Kioshi lo tomo de la mano y lo hizo caminar más lento, de tal manera que se rezagaron.

—Mamá —Kuroko noto la humedad en la mano de su hijo y miro sus mejillas sonrojadas, el chico estaba muy nervioso —no quiero hacerlo.

Kuroko sintió un poco de pena por su pequeño.

—Lo siento Kio pero ya sabes cómo es tu padre cuando toma una decisión, lamento no poder ayudarte en esto.

Kio sabía que no había forma de escapar.

—Solo respira profundo y hazlo, sin miedo. Tu padre no dejara que te pase nada y yo estaré a tu lado todo el tiempo.

Kuroko le dio un ligero apretón y Kio lo miro agradecido por las palabras de aliento.

Kagami se detuvo repentinamente y Kioshi se quedo pasmado al ver a un hombre que se ponía de pie, a lado del pelirrojo, y que parecía tan alto. Kio miraba tembloroso al enorme hombre… y al notar su cabello morado supo de inmediato que era el padre de Shouta.

 ......................

Anterior                                     Siguiente



Hola 

Cómo están?

Espero que muy bien. Les traigo un actu de la historia más pedida... por mí XD
Por qué está historia y no HO, Amuleto o En el infierno?
Por la simple razón de que esta historia me relaja y dado que casi nadie la pide no me siento presiona a entregar un mega excelente capítulo, lo cual no quiere decir que este chafa o que no le ponga empeño, sino que es una historia que me divierte y me sirve para desestresarme XD. 
Mis lindos acosadores de HO no se impacienten que ya casi termino el capítulo así que pronto habrá actu y a mi linda manada de seguidores de Kaled su capítulo va a la mitad, solo que me esta costando, no quiero que quede muy drámatico así que estoy luchando por pulirlo pa' que no necesiten pañuelos XD.
Por favor comenten -deberia decir Gise comente jajaja-. 
Los quiero mis lindos lectores.
See you :)


Comentarios

  1. Presente!! (^-^)/

    Aquí notamos dos maneras de alterar las emociones en Kuroko: una de puro miedo gracias a la insistencia de cierto caballero... Que yo no se como carajos obtuvo el número de Tetsu?! Que acaso no le quedó claro que ya no hay vuelta atrás?? Aaaah... Aomine deja en paz a Kuroko!!

    Ah, y luego está la otra que me parece le resulta mas eléctrizante, emocionante y podría jurar que hasta excitante, justo lo que mi lindo Tetsu necesita.

    Algo nuevo, algo propio, algo que le permita revivir ese lado travieso y divertido que dejó de lado para concentrarse en ser madre.

    Claro que será un poquito difícil de avanzar en esa dirección cuando Kio y Kise no cooperan, Jajaja!! Pero los entiendo, no queremos que Tetsu sufra, pero estoy segura que Kagami Taiga solo tiene buenas intenciones para con él.

    Mi lindo Kioshi muerto de nervios y orillado por su padre a enfrentar esa situación con Murasakibara... Gracias a Dios su madre está ahí para apoyarlo y ayudarlo.

    Mi única preocupación es ese vínculo Kioshi - Aomine, ojalá no sé convierta en problemas.

    Y hablando de vínculos... que hay de Kasamatsu??

    Yaay!! Keyla Chan te tenemos de regreso!! Y. ahora esperamos con paciencia las demás actualizaciones.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola!!!
      Amo tus comentarios tan largos y acertados.

      muy cierto mi pobre Kuroko no encuentra cómo deshacerse de Aomine y éste seguira insistiendo, porqué obvio ama al chiquitín. Ahora bien mi querido Taiga quiere a Kuroko de buena manera, con todo y su hijo... incluso con Kise incluido jajaja pero Kioshi creo que no será muy cooperativo y bueno el rubio tampoco quiere entregar a su Kurokochii.

      ahhhh notaste la aparición de Kasamatsu, él viene a poner en orden la vida del modelo y ya verás que a punta de golpes lo va a lograr XD

      Mi pequeño Kioshi tendrá que enfrentar al enorme papá de Shouta y esperemos que salga ileso ;)

      Pues muchas gracias por leer la historia y comentar.

      Espero leerte en el siguiente capítulo.
      Cuídate, bye.

      Eliminar

Publicar un comentario